Elemento Limitativo de un Sistema
Según García (2020), el elemento limitativo de un sistema es aquel que en un momento dado frena su crecimiento.
Por ejemplo, la exposición solar es fundamental para que la piel sintetice vitamina D, la cual es esencial para la absorción de calcio y la salud ósea. Sin embargo, en situaciones donde la exposición solar es insuficiente (por ejemplo, en climas fríos o en personas que pasan mucho tiempo en interiores), esta síntesis de vitamina D se ve limitada, incluso si hay suficiente calcio en la dieta. Aquí, la vitamina D sería el "elemento limitativo" que impide una correcta absorción del calcio, afectando la salud ósea. Este ejemplo ilustra cómo el crecimiento o funcionamiento óptimo del sistema (en este caso, la salud ósea) puede estar condicionado por un único elemento, en este caso, la vitamina D, necesaria para mantener el equilibrio del sistema (Valero Zanuy y Hawkins Carranza, 2007).
La clave no solo está en identificar el elemento limitativo, sino también en comprender que el sistema es dinámico. A medida que uno de estos elementos deja de ser limitativo, el sistema crece y la proporción entre los elementos cambia, hasta que otro se convierte en el nuevo limitador. Por ejemplo, una planta puede verse limitada hoy por la falta de agua, y mañana, una vez solucionado ese problema, por la falta de nutrientes (García, 2020).
En cualquier sistema, siempre habrá un único elemento limitativo en un momento determinado, y comprender esta dinámica es crucial para mejorar el rendimiento y el crecimiento (García, 2020).